LOS VECINOS DICEN LO CONTRARIO
Incahuasi: Aislados de covid-19 aseguran que no salen del albergue
Ante versiones de vecinos en el sentido de que las personas que cumplen aislamiento tras haber dado positivo a coronavirus estuvieran saliendo al pueblo de Incahuasi a realizar compras, el responsable del grupo que llegó de Argentina, Arturo Almazán, aseguró que no salieron del albergue y que eso dicen “por hacer maldad”.
Según mensajes de vecinos que empezaron a circular por WhatsApp, algunas personas denunciaron que los jóvenes con covid-19 salen a comprar a la tiendas de la población y que incluso adquirieron bebidas. Eso provocó que algunas personas se reunieran ayer, viernes, y decidieron pedir a las autoridades municipales y de salud el traslado de los mismos al nuevo coliseo cerrado, para seguridad de la población.
Almazán, entrevistado por De los Cintis, dijo que salir sería “una irresponsabilidad” y que varios de los vecinos los conocen y que estando en las calles fácilmente podrían reconocerlos.
Manifestó que cumplen el aislamiento en el internado escolar, que están en habitaciones separadas y que salen al patio a tomar sol, pero decir que salen hacia afuera “es una ‘inventación’” de las personas.
Contó que se sienten discriminados por la gente y autoridades, y que no comprenden el grado de estrés que están pasando, pues vienen cumpliendo cuarentena tras cuarentena; primero en Argentina, luego en Yacuiba y ahora en Incahuasi.
Algunos vecinos reportaron por WhatsApp que las 11 personas que dieron positivo a covid-19 mantienen contacto con sus familiares, algo que también fue negado por Almazán, quien dijo que a un principio sus parientes solían ir a dejar alimentos, pero los colocaban en la puerta de donde los recogían ellos; si mantenían alguna comunicación, lo hacían a unos diez metros de distancia.
Ahora, por un acuerdo con las autoridades, sus familiares lo que hacen es dejar alimentos y otros enseres en la Policía y son los uniformados quienes entregan los encargos a los aislados.
Las 11 personas que aguardan aislamiento son jóvenes comprendidos entre los 20 y 30 años de edad, que no tienen síntomas graves de covid-19, que están bien y que tienen la esperanza de salir pronto de esa situación. “Estamos bien, todos tranquilos”, apuntó.
Otro aspecto que fue cuestionado por la población es la prepotencia con la que los aislados estarían tratando al personal de salud. Almazán también desmintió esa situación y admitió que si alguna vez hubo un “reclamo fuerte” es porque estaban pidiendo mejores condiciones. Fruto de aquello, afirmó, es que lograron que la Alcaldía les diera una cocina, garrafa y olla para que hervir plastas medicinales y agua para su café de la tarde.