MARCA BOLIVIANA QUE NACE EN LOS CINTIS (PARTE III)
El singani. Tan especial, tan antiguo
Según los registros, la elaboración del singani en Bolivia se dio desde el año 1550, cuando las órdenes religiosas llegaron al país y los españoles se establecieron en cercanías de Potosí, donde empezaba el auge de la explotación minera de plata en el Cerro Rico, según relata a Página Siete Guillermo Cardona, un historiador que lleva años investigando todo sobre el singani.
Los recién llegados estaban en constante búsqueda de lugares óptimos y cercanos a la ciudad de Potosí para poder abastecer ese gran mercado. Es así que se empieza a extender la vitivinicultura en los valles de Cinti, especialmente por su proximidad a Potosí, y por sus características naturales como el tipo de tierra, el clima, la calidad de agua y la altitud, particularidades muy favorables y singulares para el cultivo de ese producto.
Fue así que se estableció la vitivinicultura en los valles de Cinti. Poco a poco fueron apareciendo viñas, bodegas, haciendas, estas últimas como unidades productivas en una etapa preindustrial, mientras el gran mercado de Potosí absorbía cada vez más todo lo que se iba produciendo, cuenta Cardona.
El nombre de singani es un vocablo propio que debe su origen a una antigua hacienda de San Andrés de la comunidad de Uruchini, en el municipio de San Lucas, provincia Nor Cinti de Chuquisaca, que se llamaba Siwingani.
Por Alcides Flores M. / Página Siete