FUE DENUNCIADO POR VIOLENCIA FAMILIAR
Un joven de 20 años quiso matar a su pareja, una adolescente de 16
Tras una denuncia de su pareja, una adolescente de 16 años, con quien tiene un bebé de siete meses, un joven de 20 fue enviado a prisión preventiva en la carceleta de Camargo por violencia familiar y estupro con agravante. Ella asegura que él amenazó con matarla y que en algunas ocasiones intentó ahorcarla en la comunidad de San Pedro de Guanaya de San Lucas.
La información fue brindada por el fiscal departamental de Chuquisaca, Mauricio Nava, quien señaló que la víctima presentó la denuncia el 18 de octubre por violencia familiar y tras la detención del sospechoso, la audiencia de medidas cautelares se realizó el miércoles, en San Lucas. El Juez determinó su detención preventiva en la carceleta de Camargo por cuatro meses.
La víctima contó que conoció a su pareja en Cochabamba cuando tenía 14 o 15 años de edad y se empleaba como trabajadora del hogar. Después, ambos retornaron a radicar a la comunidad de San Pedro de Guayana, en San Lucas, a la casa de los padres del muchacho.
La convivencia comenzó normal, pero a los pocos días la relación de la pareja comenzó a deteriorarse y la misma adquirió características de “insoportable”, pese a que ambos tenían un hijo. De las agresiones verbales, el joven pasó a las físicas.
“Comenzó a golpearme de todo y de nada, se enojaba y me golpeaba, me daba puñetes y a veces me pateaba hasta sacarme sangre. No recuerdo bien las fechas porque ahora estoy muy mal”, narró la víctima en una entrevista psicológica al indicar que en una oportunidad la tomó de su cuello y casi la mata.
Continuando con su testimonio ante el personal técnico de la Alcaldía de San Lucas, la adolescente que ahora tiene 16 dijo: “Tengo miedo de volver a mi casa, porque no sabe que estoy aquí, grave me amenazaba, me decía que si me avisaba a mis familiares, nos mataría”.
Según Nava, la víctima afirmó que estas agresiones no solo fueron ejecutadas por su pareja sino también por sus suegros, quienes alentaban a su hijo a que utilizar la violencia contra ella. Esta actitud era más expresiva en su suegra, la que en varias oportunidades le decía a su hijo: “enséñale que debe hacer caso, no sabe hacer nada”.
La adolescente también refirió que era víctima de violencia económica, pues su pareja no le daba dinero suficiente para las necesidades de su hijo y que cuando lo hacía, le pedía cuentas hasta de 50 centavos.
