Domingo, 24 de Noviembre de 2024
Actualidad Villa Abecia

​MURIÓ A LOS 85 AÑOS

Luis Achá Martínez, de Villa Abecia, dejó profunda huella en el folclore de Tarija

1812
Luis Achá Martínez, de Villa Abecia, dejó profunda huella en el folclore de Tarija
De los Cintis

El profesor Luis Achá Martínez, oriundo de Villa Abecia, dejó una profunda huella en el folclore tarijeño. Falleció ayer, martes, a los 85 años de edad en la ciudad de Tarija donde radicó gran parte de su vida. Famoso por la composición de cueca “La Culpable”, también le cantó a Padcaya y a la cuesta de Sama entre otras creaciones.

René Aguilera Fierro, presidente de la Unión de Escritores y Artistas de Tarija, en la biografía de Achá Martínez escribió que nació en Villa Abecia hace 85 años y que la escuela la cursó en su pueblo natal y después pasó a Tarija donde radicó hasta morir.

El escritor Juan Carlos Castellanos, también de Villa Abecia, publicó el siguiente homenaje al profesor Luis Achá Martínez en su cuenta de Facebook:


"ADIÓS PROF. LUIS ACHA MARTÍNEZ:

“Me trataste con dulzura, con paciencia solo tú” -dediqué este verso en La Culpable a un amor juvenil, pero con el tiempo y desvanecido este sentimiento, mi locura se convirtió en vivir, mi hogar, mi familia, porqué nadie me trató con mayor paciencia y dulzura que la vida- Esta confesión me hizo el Prof. Luis Achá Martínez, un domingo de carnaval del año 2015 en mi refugio bohemio, bajo la fresca sombra del limonero del patio de mi vieja casa de Villa Abecia, mientras sus hermanos Carlos con el acordeón, Franz con la guitarra y su sobrino Juan Carlos “Chueco” golpeando el bombo, desgranaban deliciosas cuecas y bailecitos.

Y sin duda que debió ser así, Dn. Luis vivió “con el alma y él candor, que me brota del corazón” como le cantó a Padcaya o la dulce nostalgia de volver al pago “bajando la cuesta y Sama y llegar donde de mi mama, la chapaquita que adoro yo”, fragmentos que engalanan la exquisitez de letra y música de sus inspiraciones.

La paciencia de la vida llegó a su fin, se marchó dejándonos sus inmortales cuecas y en lo personal, atesoro sus travesuras de pantalón corto y honda al cuello que me relatara, junto a sus amigos de infancia Weimar Ríos y Simón (michi) Rodríguez durante sus años de escolino en su natal Villa Abecia.

Adiós inolvidable Prof. Luis Achá Martínez, la culpable está absuelta y con esa libertad, seguirá por siempre agitando pañuelos cuando de cantar y bailar una buena cueca se trate".

Te puede interesar

Más leídas [Últimos 15 días]
Clima