PINCELADAS A LAS COSTUMBRES DE LOS PUEBLOS
Navidad en los Cintis: Unión familiar en medio de las tradiciones
La Navidad en la región de los Cintis, como en todo el mundo, es el recuentro y la unión familiar en el nacimiento del Niño Jesús, pero también la expresión de una tradición cultural marcada por la fe. Hoy, Noche Buena, los pobladores de Villa Charcas, Villa Abecia, Las Carreras, Incahuasi, Camargo, San Lucas y Culpina acudirán a la misa de medianoche, también conocida como la tutamisa o la misa de gallo. Mañana, en la Navidad del Señor, a las 10:00, los feligreses asistirán a la misa.
De los Cintis, el periódico digital de los cinteños quiere sumarse a este acontecimiento mostrándoles algunas pinceladas de una tradicional fiesta que hoy en día se vive, recogiendo impresiones de gente del lugar. De hecho, esperamos que este pequeño ensayo sólo sirva para ayudar no sólo a preservar la forma de cómo se vive la Navidad en la Región sino también para rescatar costumbres que están en el umbral del olvido y revalorizarlas.
SAN LUCAS
Edil Martínez cuenta que la Navidad en San Lucas se caracteriza por la adoración al Niño Jesús en varias casas, que por lo general son Niños “antiguos” que pasan de generación en generación familiar; una gran parte de ellos son cusqueños, precisa. Pero el que acapara la atención del pueblo es el Niño de la familia Delgado – Valverde, en cuya casa se dan cita las personas del pueblo y de las comunidades sin ningún tipo de distinción durante la Noche Buena y el día de Navidad.
Como es tradicional, dice Martínez, los villancicos se interpretan con acordeón, quena y guitarra.
A la misa de Noche Buena los feligreses asisten llevando a sus Niños y los colocan en la puerta del templo para que todos los adoren. La víspera de Navidad se vive con juegos artificiales en la plaza. Mañana, a las 10:00, todos irán a misa y después adorarán a los niños en sus casas, pero sin dejar de ir a la adoración del Niño de la familia Delgado - Valverde.
LAS CARRERAS Y VILLA ABECIA
La celebración de la Navidad en ambos municipios tiene mucha similitud, sostiene Miguel Gorena al indicar que en las comunidades de Lima, La Torre y Santa Rosa hoy, Noche Buena, la gente amanecerá adorando al Niño Jesús al ritmo del bombito y la quena. Los alféreces ofrecen a niños y adultos chocolate con leche y en la Navidad la sopa y picante de gallina criolla. En el Pueblo, la gente participará de la misa de medianoche y mañana en la misa de Navidad.
En Villa Abecia, esta noche los feligreses asistirán a misa y mañana Navidad los barrios Villa Nueva, Central y Panamericano asistirán a la misa de las 10:00 cargados de sus palos para adorar al Niñito con la trenza. Gorena dice que los tres palos se colocan en la plaza y grupos de 12 personas adoran trenzando el palo ante la mirada atenta de una gran cantidad de público. Es costumbre que las familias que tienen su Niño lo lleven a escuchar misa, complementa.
CULPINA
María Elena Villalpando cuenta que la adoración al Niño Jesús inicia hoy en la parroquia Señor de Pilaya y en algunas casas de vecinos del pueblo y de las comunidades.
En el templo se armó un gran pesebre y en base a una lista que se levanta con anticipación, hay familias que se encargan de la adoración que es interpretada por niños y por algunos adolescentes. La familia de turno suele llevar su “Niño” que lo coloca en el pesebre e invita a los niños arroz con leche, buñuelos, pastillas o sodas.
Para participar de esta gran adoración, las familias voluntariamente se hacen anotar en la lista, dice Villalpando.
Como en toda la región de los Cintis, en Culpina la gente en Noche Buena asiste a la tutamisa y en Navidad a la misa de las 10:00, llevando a sus Niños.
VILLA CHARCAS
Celina Lima cuenta que en Villa Charcas, durante la Navidad, la parroquia organiza un gran concurso de adoración al Niño Jesús que se realiza en la plaza central en el frontis del templo, con la participación de las comunidades que llegan a presentar sus canciones y danzas auténticas de adoración al Niñito.
Sostiene que desde hace años, la familia Martínez, que radica en Cochabamba, llega a Villa Charcas para hacer adorar al Niño interpretando villancicos con instrumentos musicales. Las danzas son por toda la plaza, apunta.
CAMARGO
En Camargo, en Noche Buena, los feligreses suelen asistir a misa llevando a sus Niños y algunos llegan al ritmo de villancicos interpretados por quena, bombito y bombo, cuenta Gabriela Mendieta. Lo mismo ocurre en la misa de Navidad a la que asisten personas de las comunidades cercanas. Después, en los siguientes días, hay familias que organizan grandes fiestas del Niño hasta el 6 de enero, aunque otras lo hacen más tarde. Los camargueños mantienen sus auténticas tradiciones de adoración al Niño Jesús.
INCAHUASI
La adoración la Niño Dios comienza en Noche Buena en un pesebre que se arma en la puerta del templo, cuenta Alberto Amaro. En Navidad, varios grupos de las comunidades llegan al pueblo para participar de un concurso de villancicos y adoraciones.
La Navidad en la región de los Cintis también se caracteriza por compartir en familia la tradicional picana de carne de vaca y un asado de chancho acompañado de un rico vino. Los mayores suelen preparar chocolate con leche y buñuelos para invitar a los niños en las adoraciones; los adultos se sirven un néctar de leche, canela o ponche de vino.