HAZAÑA PARA LOS CINTIS
Caisa K en voleibol niñas gana a Tupiza y pasa a la final de los Pluris
El equipo de Caisa K (Villa Charcas - Chuquisaca) en voleibol niñas pasó a la final del torneo al cobrarse revancha de Tupiza (Potosí) al vencer 2x0 en el marco de los VI Juegos Deportivos Plurinacionales presidente Evo de Primaria fase nacional, que se desarrolla en Potosí. Las niñas lograron una gran hazaña que enorgullece a la región de los Cintis.
La victoria de 2x0 (25-15 y 25-18) causó sorpresa, pues un equipo de una escuela de comunidad distante a 40 kilómetros aproximadamente de la capital de municipio de Villa Charcas dejó en el camino a varias representaciones departamentales con equipos de ciudad donde frecuentemente se juega voleibol. En la ronda de clasificación fueron derrotas 2x1. La final la disputarán mañana, sábado, frente a Cochabamba.
Al redactar esta nota quiero dejar de ser periodista y como ser humano expresar mi admiración y gran alegría por este enorme logro de las niñas de primaria de Caisa K y del profesor de Educación Física, Zenón Incata, que realizó un gran trabajo. Hago mención especial al director Distrital de Educación de Villa Charcas, Paulino Flores, que nunca perdió la fe en el equipo y estuvo acompañándoles siempre.
La satisfacción que nos regalaron las niñas es indescriptible. Debo confesar que al conocer el resultado la emoción me embargó hasta las lágrimas, pues con su entrega nos están enseñando que nada es imposible en la vida cuando hay entrega y determinación en el trabajo.
De hecho, los padres de familia de los niños cómo no hubieran querido acompañar a sus hijos, pero no pueden. La comunidad es pobre y no tienen dinero para pagar el transporte, alojamiento y alimentación. En Caisa K no hay telefonía celular y quién si en este momento conocen realmente lo que está aconteciendo con sus hijos, pero de todos modos pienso que son felices, porque siempre apoyaron a sus hijas.
Recuerdo que en la fase departamental, cuando lograron el título de Primaria en voleibol, el profesor y las niñas me contaron que para salir de su comunidad hasta Villa Charcas fueron transportadas en una volqueta y que cuando llegaron con el título a Villa Charcas “nadie les alcanzó ni un vaso de agua”. Recuerdo muy bien la foto que me envió Incata donde todos los niños estaban tendidos o sentados en la acera de la Alcaldía esperando que alguien los recogiera.
Pero esta indiferencia nunca caló hondo en sus tiernos corazones. Todo el equipo apuntaba lejos y siguieron enfocados en sus metas.
Entrenar todos los días bajo el abrazador sol de mediodía y de la tarde nunca fue excusa. Caminar dos a tres horas diarias madrugando o regresando en las noches a su casa tampoco fue obstáculo para que siguieran soñando. Todas estaban altamente motivadas y querían llegar lejos y llegaron lejos, gracias a la profunda pasión y capacidad que le puso Incata a su trabajo.
Al escuchar el resultado de esta mañana inmediatamente se me vino a la mente otra frase que dijo Incata: “Salimos campeones y ahora vamos a exigir que nos construyan un colegio”; el que tienen es de data antigua que se fue edificando de manera improvisada conforme iba creciendo el número de cursos.
Ahora, tras esta gran hazaña, pienso que con mayor derecho deben reclamar su nuevo colegio y las autoridades comprometerse con ese sueño, pues las niñas, los niños y el profesor Incata hicieron los méritos suficientes para ganarse la gloria de los Juegos Plurinacionales y un colegio para su comunidad.
Me salí del marco, pero vale la pena. ¡Adelante Caisa K!!